Recuperar datos de móviles mediante la técnica chip-off

Recuperar datos de movil smartphone - Extraccion del chip

En recuperación de datos de teléfonos móviles, se utiliza el método “chip-off” (extraer el chip) cuando no se puede acceder a la información a través del interface de usuario.

Gracias a esta técnica avanzada se pueden recuperar datos de móviles que han sufrido daños físicos o eléctricos -ya sea por causas externas o fallos de fabricación-, así como problemas de firmware (microcódigo que controla los circuitos electrónicos del dispositivo).

El chip-off también permite recuperar datos de memorias flash como las SD de las cámaras fotográficas y recuperar datos de pendrives y tablets.

Para realizar una operación de chip-off, es necesario desoldar el chip de memoria de la placa base con una máquina de infrarrojos. A continuación, se conectará el chip a un lector de memorias flash con el fin de copiar su contenido.

El objetivo es conseguir una imagen completa de la información en estado bruto, para finalmente analizarla y reconstruirla mediante software especializado.

Este procedimiento para recuperar datos de móviles es delicado y laborioso, por lo que suele usarse como último recurso, cuando otras soluciones menos invasivas no son aplicables.

Recuperar datos de movil smartphone - Lectura del chip
Recuperar datos de móvil mediante chip-off: Lectura del chip

Recuperar datos del móvil LG G4

Como ejemplo, en el laboratorio de Ondata hemos utilizado chip-off para recuperar datos del modelo LG G4 (en la imagen de cabecera), que había quedado inservible debido a un conocido fallo de fabricación.

Desde el año pasado muchos usuarios del LG G4 se han encontrado con que su terminal sufre reinicios inesperados y sobrecalentamiento.

El origen del problema: las soldaduras de algunos componentes de la placa base se deterioran, y el sobrecalentamiento de la misma hace que continuamente se esté reseteando el teléfono.

Los síntomas: el móvil entra en un bucle de reinicios al encenderse, queda inutilizable y resulta imposible acceder a los datos.

La solución: En este caso el chip-off ha sido la técnica utilizada para recuperar los datos del móvil.

Recuperación de datos para teléfonos averiados

No es ninguna sorpresa que los teléfonos móviles acaben albergando grandes cantidades de nuestra información más valiosa, dada su imparable tasa de penetración y de uso. Libretas de contactos, números de teléfono, emails, música, fotos… contenidos irremplazables si el dispositivo falla y no tenemos, o no funciona, la copia de seguridad.

Cuando los teléfonos se averían, los servicios técnicos de los fabricantes suelen estar habilitados sólo para reparar los fallos del dispositivo, y los datos se pierden. Si quiere recuperar datos de un móvil estropeado, no dude en ponerse en contacto con nuestro laboratorio de recuperación de datos. Ondata cuenta con la tecnología más avanzada y un equipo de técnicos especializados en recuperar datos de móviles, tablets y cualquier otro dispositivo digital.

Recuperar datos o fotos de una tarjeta micro SD dañada en 3 pasos

Recuperar fotos de una tarjeta micro SD dañada será hoy el mayor problema de Marta, aunque ella aún no lo sabe...

Marta, la protagonista del vídeo, es fotógrafa y está muy contenta con el reportaje de boda que acaba de hacer. Ya sólo tiene que copiar las fotos de la tarjeta micro SD.

Pero… ¡el PC no reconoce la micro SD! No puede acceder a las fotos, ¿qué les va a decir a los novios? Tendrá que recurrir a un servicio de recuperación de datos

Si estás leyendo este post, puede que tú también necesites recuperar datos o fotos de una tarjeta micro SD dañada. La recuperación de datos de micro SD suele solicitarse por factores diversos, ya sea por un daño físico o por un problema de archivos corruptos debido a que las memorias de tipo flash tienen una vida limitada

En el laboratorio de Ondata International disponemos de la experiencia y la tecnología para realizar con éxito la recuperación de tus datos o fotos. Hemos recuperado fotografías de diferentes unidades extraíbles como pueden ser:

  • Secure Digital (SD)
  • Micro SD
  • Mini SD
  • Compact Flash
  • Micro Drive
  • Memory stick
  • Smart Media
  • Flash Memory

Mediante la utilización de hardware y software especializado, nuestros técnicos consiguen recuperar las fotos de una micro SD dañada y te las entregan en un dispositivo nuevo.

Cuando se pierde el acceso a las fotos o datos de una micro SD, se recomienda seguir los consejos habituales para asegurar que la recuperación de datos sea viable: no grabar ningún fichero adicional en la misma unidad, ni intentar recuperar la información por medios “caseros” ya que podría dañar más el dispositivo, hasta el punto de que no se pueda realizar una recuperación de datos completa o incluso que no se pueda recuperar ninguna fotografía.

3 pasos para recuperar datos o fotos de una tarjeta micro SD

3 pasos para recuperar datos o fotos de una tarjeta micro SD dañada

En el vídeo, nuestra protagonista llama a la tienda de electrónica y le ponen en contacto con Ondata. Ya sólo tiene que seguir 3 pasos: pedir un diagnóstico gratuito, aprobar el presupuesto y recibir las fotos.

Para empezar entra en www.ondata.es y rellena el formulario para solicitar el diagnóstico y presupuesto. Envuelve perfectamente la tarjeta fotográfica y la envía por mensajero a Ondata.

Cuando llega la tarjeta a las instalaciones de Ondata, en menos de 24 horas los ingenieros evalúan la avería. Marta recibe el diagnóstico, revisa el presupuesto online y lo aprueba. En el laboratorio se inicia el proceso para recuperar las fotos.

Una vez completado el proceso, Marta recibe la factura y un listado completo de los archivos fotográficos recuperados junto con la factura, y una vez abonada recibe las fotos digitales en un disco externo. ¡Por fin podrá entregar su reportaje!

Si has perdido tus fotos digitales confía, como Marta, en la experiencia de Ondata: pide tu presupuesto gratuito entrando en www.ondata.es o llamando a los teléfonos 902 199 490 / 91 4174468.

¿Cómo entran las hormigas en un disco duro?

Recuperacion de datos de disco duro dañado por hormigas

En esta foto os mostramos un disco duro lleno de hormigas que hemos recibido en el laboratorio de recuperación de datos, procedente de un país africano.

Como sabréis, los discos duros son sumamente delicados, en especial los platos magnéticos donde se almacenan los datos en formato digital.

Cuando los platos empiezan a girar, cualquier partícula minúscula causa daños en la emulsión magnética al ser arrastrada por las cabezas de lectura-escritura.

Y cualquier daño en la emulsión magnética puede dificultar o imposibilitar la recuperación de los datos. Ya os imagináis que encontrar una legión de insectos paseándose por los platos no es una buena noticia…

Los discos suelen salir de fábrica herméticamente sellados. Muchos tienen un conducto de ventilación, pero llevan un filtro para que ninguna partícula pueda pasar. Entonces, ¿cómo han podido entrar las hormigas?

En este caso parece que han logrado encontrar un camino hasta la goma que sella herméticamente el disco por el lado del conector SATA. Entonces, han roído la goma, han entrado en la unidad y se han puesto a recorrerla tranquilamente, llegando hasta los platos magnéticos como véis en la imagen.

En otras ocasiones se ha descrito la entrada de hormigas a través de diminutos orificios de ventilación.

¿Por qué atraen a las hormigas los dispositivos electrónicos?

A las hormigas a menudo les gusta anidar dentro de los ordenadores y otros aparatos eléctricos debido al calor que desprenden, lo cual acelera el desarrollo y crecimiento de sus crías.

La electricidad no sólo no las ahuyenta, sino que al parecer las atrae en ciertos casos. Son famosas por ello las llamadas “hormigas locas”, una especie invasora que en Texas (EEUU) ha llegado a irrumpir masivamente en todo tipo de aparatos eléctricos, produciendo cortocircuitos y causando problemas hasta en el centro de la NASA en Houston, aparte de un buen número de incidentes de discos duros dañados y pérdidas de datos en ordenadores domésticos, laptops y smartphones.

En los foros de internet no escasean las historias de discos invadidos por hormigas. Casi siempre hay algún forero chistoso que no se resiste a decirle al afectado que tiene que hacer “debug” de su sistema, bromeando con la palabra técnica debug, que en el argot informático se refiere a depurar o “eliminar errores” y en su sentido literal significa “eliminar los bichos”. Ya en la época de las primeras computadoras electromecánicas hay documentada alguna famosa anécdota en que un insecto real fue la causa de los fallos del sistema.

Anécdotas aparte, hay que evitar por todos los medios este tipo de problemas, así que si encuentras hormigas cerca de tu ordenador, no lo dejes para mañana y toma las medidas oportunas para que la zona esté libre de insectos. Cualquier parásito dentro del disco puede causar daños irreparables en los platos magnéticos, dificultando en gran medida la recuperación de los datos contenidos en el mismo.

Cómo reducir en verano el riesgo de pérdida de datos

Disco duro y temperaturas altas

Como cada verano, el laboratorio de recuperación de datos de Ondata ve aumentar el número de averías debidas a las altas temperaturas y picos de tensión.

Hoy os contamos de forma básica cómo afectan a los discos duros estos dos factores —calor y sobretensión—, esperando evitar algún disgusto veraniego de pérdida de datos mediante medidas sencillas de prevención, como no dejar el ordenador en un coche a pleno sol, o desconectar los enchufes en caso de tormenta.

Tu disco duro y el calor

El disco duro se ve afectado por el calor de dos formas: por el recalentamiento y por los posibles cambios bruscos de temperatura. Las averías vendrán originadas por la dilatación de las piezas mecánicas al calentarse excesivamente, por su posterior contracción al pasar del calor al frío (o el proceso contrario al pasar del frío al calor), así como por la posible condensación causada dentro del disco al variar rápidamente su temperatura.

Pero… ¿cuánto es “demasiado calor” para un disco duro? ¿A qué temperatura se pone cuando está en funcionamiento? ¿Sabes cuál es el rango de temperatura recomendado para tu disco? Si tienes curiosidad por conocer los datos concretos de tu dispositivo, los encontrarás en las especificaciones del fabricante, aunque ya te adelantamos que en general, la máxima temperatura aceptable para un disco que está funcionando es de 55°C, y en algunos modelos hasta 60°C.

En cuanto a la temperatura estando apagado (non-operating temperature), el límite máximo aceptable sube hasta los 70°C.

A pesar de que puedan parecer límites muy elevados, se trata de temperaturas bastante más bajas que las que pueden soportar otros componentes del ordenador, por ejemplo las placas de vídeo o los procesadores.

¿Cuál es entonces la temperatura de funcionamiento ideal para los discos duros? Es un tema controvertido, aunque diversos informes y foros situan el rango ideal entre los 25 y 40°C.

¿A qué temperatura está tu disco mientras lees este blog? Si quieres, puedes averiguarlo con la aplicación Disk Control de Ondata, que lee los sensores de temperatura del disco y te informa de su evolución, para que puedas tomar medidas si es necesario. Puedes descargar la versión demo de Ondata Disk Control desde aquí.

Ondata Disk Control

Efectos del calor y de los cambios bruscos de temperatura

Una temperatura muy alta puede provocar que el sistema de ventilación no refrigere lo suficiente y los discos se sobrecalienten. En los ordenadores modernos, este inconveniente suele minimizarse mediante un buen diseño del sistema de ventilación; los mayores problemas pueden surgir si se somete al ordenador a cambios bruscos de temperatura.

Por ejemplo, cuando tenemos un equipo portátil que se traslada con frecuencia entre la vivienda, el coche y la oficina, los cambios de temperatura son continuos. Si dejamos el coche al sol, una temperatura exterior de 35 grados centígrados puede causar más de 60 en el interior del vehículo. Por si fuera poco, además de la alta temperatura hay un agravante añadido: lo deprisa que se calienta. Cualquiera sabe que el coche se convierte en un “horno” tras estar aparcado a pleno sol durante horas; lo que no es tan obvio, como destacan algunos estudios, es que el interior de un coche a pleno sol puede subir en promedio unos 20 grados centígrados, en sólo una hora.

Si desde un coche al sol nos llevamos el portátil a la oficina o a la cafetería con aire acondicionado, allí habrá 20, 21 o 22 grados. Esta temperatura sería aceptable en circunstancias normales, pero en nuestro ejemplo, estaríamos sometiendo al disco a una disminución casi instantánea desde los 60 grados del coche a los 20 del aire acondicionado, aumentando de forma importante la posibilidad de una avería.

El disco duro tiene componentes electromecánicos que son de alta precisión y tienen que estar perfectamente sincronizados entre sí. Están preparados para funcionar en un rango amplio de temperaturas, pero cambios muy bruscos pueden ocasionar que algunas de las piezas tengan un funcionamiento defectuoso. Pueden existir distintos fallos por el problema mecánico de una expansión o reducción del tamaño físico debido al calor o al frío, por ejemplo un posible «desalineamiento» de los cabezales en la zona de aparcamiento, que al poner el disco en marcha causen daños.

Tormenta verano

Sobretensión: cuidado con las tormentas

Las pérdidas de datos por efecto de las tormentas son muy típicas del verano, aunque naturalmente son posibles durante todo el año. Las sobretensiones causadas por rayos pueden dañar los circuitos de los discos duros y en ocasiones llegan a destruir los datos.

Actualmente, las viviendas y oficinas están preparadas para las sobretensiones. Todas las compañías eléctricas tienen instalados sistemas de protección para que no haya averías y no exista peligro para las personas. Pero en caso de tormenta, existe la posibilidad de que la energía eléctrica de un rayo caiga sobre tendidos eléctricos que se vean afectados parcialmente. No suele suceder nada; las protecciones de las líneas normalmente absorben ese impacto eléctrico, pero puede producirse una pequeña sobretensión que va a ir traspasándose y va a llegar a las viviendas y a las oficinas.

Como es sabido, el ordenador funciona a 220 voltios. Sin embargo, en su interior, la mayoría de los componentes electrónicos funcionan a muy baja tensión, por medio de un sistema de alimentación interno. Hay componentes que funcionan a 12 voltios, a 5 o a menos. Cuando hay una sobretensión que logra pasar todos los filtros, a los pequeños circuitos internos del ordenador llega un voltaje mucho mayor de lo que están preparados para soportar. En este caso se pueden producir averías incluso con el ordenador apagado.

Por eso la recomendación será, sobre todo en verano, que si vamos a estar ausentes no dejemos el ordenador conectado a la red eléctrica, sino que físicamente desconectemos los cables de los enchufes. Apagar el ordenador y desconectarlo del enchufe es la mejor protección durante una tormenta eléctrica.

Si a pesar de tus precauciones no puedes acceder a los datos, lo más prudente es apagar el equipo y no intentar remedios caseros; la manipulación por manos inexpertas podría producir daños fatales. Solo una empresa especializada en recuperar datos de discos duros dispone del personal cualificado y los materiales necesarios para dar una solución con garantías. El laboratorio de recuperación de datos de Ondata International realiza el diagnóstico de este tipo de avería de forma gratuita y sin compromiso.

¿Necesitas reparar el disco duro o recuperar tus datos?

“Buenos días, llamaba porque se me ha estropeado el ordenador y necesito reparar el disco duro”. Pero, ¿en realidad lo que el cliente quiere es reparar el disco duro? ¿O lo que le interesa es recuperar sus datos?

La distinción entre reparar el disco duro y recuperar los datos quizá parezca sutil. Sin embargo, entenderla puede suponer la diferencia entre conservar tus fotos familiares, los diseños de tu estudio o la contabilidad de la empresa… o despedirte de ellos para siempre. Por ejemplo, si llevas el PC a una tienda de informática para que “lo reparen”, es posible que te lo devuelvan funcionando perfectamente pero… con el disco vacío.

Entonces, ¿cuál es tu caso? ¿Has perdido el acceso a tus archivos y necesitas recuperarlos? Si es así, en el servicio de recuperación de datos de Ondata podemos ayudarte. Aunque probablemente, para recuperar la información, ¡no vamos a reparar el disco duro dañado!

¿Por qué no? Los discos duros contienen mecanismos de alta precisión, con unos ajustes que sólo se pueden realizar en fábrica. Por ejemplo, si tu disco externo no es reconocido por el PC tras sufrir una caída, los daños pueden haber afectado a sus mecanismos internos (cabezales de lectura-escritura, motor de giro…) o a los delicados platos magnéticos, todo ello imposible de restaurar a su estado original de fábrica.

Cuando se quiere extraer la información de un disco duro averiado, existen técnicas específicas para poner en funcionamiento el disco y estabilizarlo durante un tiempo limitado, suficiente para volcar los datos a otro soporte. En algunos casos, si el fallo no afectó a la zona de datos, los discos pueden quedar operativos; pero en general no es viable repararlos de forma permanente.

De hecho, el laboratorio de Ondata siempre entrega los resultados de la recuperación de datos en un soporte nuevo. Se acompaña el disco dañado original que a veces vuelve a funcionar, advirtiendo al usuario del riesgo que implicaría seguir trabajando con ese disco original, ya que no es fiable y puede volver a fallar en cualquier momento.

Si ya has decidido que recuperar tus archivos es lo más importante, no dejes que nadie intente acceder a los datos sin la tecnología adecuada, ya que incluso el mero hecho de mantener el ordenador en funcionamiento puede dañar el disco de forma irremediable. La mejor recomendación es que solicites a un servicio especializado un diagnóstico gratuito del estado del disco y las posibilidades de recuperar los datos.

recuperar datos o reparar disco duro dañado

Cómo cuidar tus datos en caso de mantenimiento o avería del PC

Recuperaciones de datos "caseras"

Si nuestro disco duro contiene ficheros importantes y llega el día en que nos encontramos con una avería o necesitamos un mantenimiento rutinario, seguramente nos alegraremos de tener unos conocimientos básicos sobre el cuidado de nuestros datos.

Por ejemplo: se te ha roto el disco duro. La oferta de tu amigo informático para arreglarlo por medios caseros puede resultar tentadora, pero antes de tomar una decisión, hay algo que te interesará saber. Los datos del disco duro suelen ser recuperables en más del 80% de los casos, sin embargo está comprobado que la probabilidad de recuperación disminuye drásticamente si se manipula el disco sin los medios adecuados.

Por otro lado, si recurres a un servicio de reparación de ordenadores, puede que te devuelvan la máquina arreglada con profesionalidad y rapidez. Pero, ¿y si no te preguntan qué hacer con los datos, y a ti no se te ocurre decir que necesitas conservarlos? Podrías encontrarte con una buena sorpresa… un disco nuevo y reluciente, pero vacío.

Como en artículos anteriores, hoy traemos algunos casos reales atendidos por el laboratorio de Ondata, situaciones cotidianas que podrían ocurrirle a cualquier usuario. Todos ellos han tenido que solicitar una recuperación de datos después de un intento infructuoso de solucionar una avería, o tras realizar un mantenimiento sin tener en cuenta que era necesario conservar los datos.

«Me abrió el disco un vecino que entiende de esto.»

Aunque tu vecino sea muy entendido y abra el disco con el máximo cuidado, la realidad es que los discos duros sólo deben abrirse dentro de un dispositivo de tecnología avanzada que se denomina “cámara limpia”, para que las partículas de polvo no dañen la superficie de los platos.

Cuando nos llegan al laboratorio discos que han sido abiertos, tienen que manejarse necesariamente en la cámara limpia, con lo que la recuperación, además de más complicada, va a ser más costosa.

Si un especialista hubiera sido el primero en evaluar la avería, quizá nos hubiéramos encontrado con la grata sorpresa de que se podía arreglar sin ni siquiera abrirlo.

«Me cambió el sistema operativo un amigo y me borró los datos.»

De la misma manera que nosotros damos por hecho que lo más importante de nuestro disco duro son los datos… la gente va a dar por hecho que ya hemos hecho una copia de seguridad.

El problema es que algunos usuarios con pocos conocimientos informáticos no saben que al hacer ciertas operaciones de mantenimiento, los datos se sobrescriben. Y entre que unos dan por hecho una cosa y otros, otra… el resultado es que los datos se sobrescriben y no hay copia de seguridad.

Aun así, aunque se hayan grabado datos nuevos encima de los nuestros, en ciertos casos es posible recuperar parte de la información recurriendo a un servicio especializado. Hasta entonces es recomendable no volver a conectar el ordenador, pues cada vez que se enciende se sobrescriben datos.

«Me arreglaron el ordenador… sustituyendo el disco duro, ¡pero necesito los datos!»

No todo el mundo sabe que «arreglar el ordenador»… no implica necesariamente recuperar los datos. Los servicios técnicos se dedican a reparar ordenadores y eso es lo que van a hacer: si el disco falla, sustituyen el disco para que el ordenador funcione. Y te devuelven tu ordenador como nuevo, pero en ocasiones, cuando vas a buscar tus ficheros… ¡no hay nada en el disco!

Por otro lado, que un disco no funcione no significa que los datos se hayan evaporado. Es muy posible que puedan extraerse en un laboratorio de recuperación de datos con la tecnología necesaria. Por eso es fundamental pedir al servicio técnico que no olvide devolvernos el disco duro original para poder llevarlo a los especialistas.

«Mi amigo intentó recuperar el disco sacándolo de la carcasa externa y la carcasa ya no la tengo. La tiró.»

Una de las ventajas de recurrir a un servicio especializado en recuperación de datos es que los técnicos van a estar al corriente de los últimos avances tecnológicos que puedan afectar a la recuperación de datos.

Por ejemplo, es normal que tu amigo no sepa esto, porque antes no era necesario conservar las carcasas externas de los discos duros; sin embargo últimamente algunas marcas, especialmente algunos modelos de Western Digital, llevan un tipo de encriptación en la carcasa, por lo que hay que conservarla para poder desencriptar los datos del disco.

Conclusiones

De todos estos casos podríamos sacar las tres “moralejas” siguientes:

  • No descuidar nunca las copias de seguridad, especialmente antes de realizar operaciones de mantenimiento del PC.
  • En caso de mantenimiento o reparación que vaya a actuar sobre el disco y por tanto pueda afectar a nuestros datos, no dar nada por supuesto: asegurarnos de hablar con el técnico sobre la conservación de los datos.
  • Por muy buena intención que se ponga en una reparación casera, hay cosas que sólo se pueden solucionar con la tecnología y los conocimientos adecuados. De otro modo, la manipulación inexperta del disco duro puede hacer que se pierdan los datos para siempre o que la recuperación sea más costosa.

Si algún tipo de avería te impide acceder a los datos del disco duro, teléfono, tableta o cualquier otro dispositivo, no dudes en solicitar a Ondata un presupuesto de recuperación de datos sin compromiso.

Falsas creencias sobre la recuperación de datos [Parte III]

Disco duro abierto

Seguimos ofreciendo respuestas a falsas creencias sobre la tecnología y los costes implicados en los procesos de recuperación de datos.

«Lo abrí, pero lo volví a cerrar enseguida».

El disco duro es extremadamente sensible a la humedad y al polvo. Cualquier partícula imperceptible a simple vista puede dañar la superficie de los platos. Así que, por muy poco tiempo que se hayan expuesto los platos al aire, el daño puede ser irreparable.

Si es necesario abrir el disco, debe hacerse en una cabina especial, denominada “cámara limpia”, construida siguiendo normas técnicas muy estrictas y que ofrece la máxima seguridad para su disco duro en el proceso de recuperar datos, aislándolo del polvo y otras partículas nocivas, y controlando en todo momento la temperatura, la presión y la humedad a la que se ve sometido.

Hay ocasiones, además, en las que el disco no hubiera necesitado apertura, porque el fallo no lo requería; sin embargo, al haber sido abierto requiere que se trabaje con él en la cámara limpia y, en algunos casos, un fallo que hubiera sido recuperable se convierte en irrecuperable por una mala manipulación «casera».

«¿Tan caro? ¡Si eso es conectarlo a una máquina y ya está!»

Las máquinas y el software utilizados en nuestro laboratorio son muy avanzados pero no son autónomos; tienen que ser manejados por un grupo de técnicos e ingenieros que son quienes toman las decisiones que llevan a la recuperación de los datos.

Cada caso de recuperación de datos requiere un enfoque diferente. No se recupera de la misma forma un daño lógico que un daño físico, y en la mayoría de ocasiones el disco va a pasar por varias manos y varias herramientas para poder ser recuperado. Nuestro personal invierte además muchas horas en I+D, para lograr resolver fallos nuevos o para acceder a dispositivos que acaban de aparecer en el mercado.

«Ayer funcionaba.»

En algunos casos los discos van dando avisos de que empiezan a fallar: empiezan a ir más lentos, dan mensajes de error, tardan en ser reconocidos por el ordenador, empiezan a hacer ruidos, etc. Pero que el disco no haya dado avisos no implica que el fallo sea trivial, puede ser igualmente grave y requerir un proceso complejo para su recuperación.

Más artículos en esta serie:

  1. Falsas creencias sobre la recuperación de datos [Parte I]
  2. Falsas creencias sobre la recuperación de datos [Parte II]
  3. Falsas creencias sobre la recuperación de datos [Parte III]

Falsas creencias sobre la recuperación de datos [Parte II]

Platos disco duro

Si necesita recurrir a los servicios de un especialista en recuperación de datos, esta serie de artículos sobre “falsas creencias” puede ayudarle a entender algunos aspectos del proceso de recuperación.

«¿Piezas? Yo no necesito que arreglen el disco, sólo quiero los datos.»

Aunque en Ondata International contamos con un amplio stock de piezas de repuesto, cada vez es más frecuente, debido a la cantidad de modelos nuevos que salen al mercado, que tengamos que adquirir piezas específicas para alguna recuperación, la mayoría de veces en el extranjero. De hecho, las piezas de repuesto no sólo tienen que ser de un disco duro del mismo modelo, sino que deben tener el mismo part number (número de pieza) para que sean idénticas.

Estas piezas son necesarias para poner el disco en funcionamiento en una situación controlada que requiere el uso de maquinaria y software especializado. Es decir, las piezas son para conseguir acceder a los datos, no para reparar el disco. Una vez recuperados los datos, se volcarán en un disco nuevo.

«Por ese coste me compro un disco duro nuevo.»

Sin duda, comprar un disco nuevo es una solución económica, rápida y sencilla… pero el problema es que el disco nuevo no va a contener los datos perdidos.

Los servicios de recuperación de datos tienen costes altos porque no consisten en sustituir un disco por otro: para mantener un laboratorio es necesario adquirir maquinaria y licencias de software que tienen un elevado coste, y todo ello ha de actualizarse de forma continua (cada día aparecen nuevos dispositivos, sistemas operativos, fallos y virus que no existían antes, etc.).

Además, los técnicos e ingenieros tienen que estar formándose constantemente y los cursos que han de recibir, muchos de ellos en el extranjero, también tienen un coste.

«Eso es solo cambiar un plato por otro y ya está».

Igual que en el apartado anterior, sustituir un plato por otro nuevo o poner el plato antiguo en un disco nuevo, no va a solucionar el problema. Y por supuesto, pueden darse otras muchas averías que no consisten en un fallo de los platos.

Más artículos en esta serie:

  1. Falsas creencias sobre la recuperación de datos [Parte I]
  2. Falsas creencias sobre la recuperación de datos [Parte II]
  3. Falsas creencias sobre la recuperación de datos [Parte III]

Falsas creencias sobre la recuperación de datos [Parte I]

Disco duro averiado

Perder los datos de tu disco duro no es, afortunadamente, algo que ocurra todos los días. Por ello, la mayoría de clientes que solicitan los servicios de Ondata desconocen la problemática de la recuperación de datos, y en ocasiones sus expectativas son muy diferentes de la realidad.

Algunas falsas creencias sobre el funcionamiento de los discos duros no son de mucha ayuda en la misión de rescatar la información perdida. En esta serie de artículos intentamos aclarar algunas dudas que nos encontramos cada día en el servicio de recuperación de datos.

«No es un fallo mecánico porque el disco no se cayó al suelo.»

Los discos que han sufrido una caída suelen tener fallos mecánicos; pero eso no implica que todos los fallos mecánicos se originen por caídas. A veces, los discos vienen mal de fábrica y alguna pieza interna empieza a fallar hasta que acaba provocando un fallo mecánico que deja el disco inutilizable. Hay discos que con sólo una o dos semanas de uso fallan mecánicamente. También puede haber otras situaciones, como los picos de tensión, que acaban provocando fallos mecánicos.

«Al disco no le pasa nada, simplemente no funciona».

Entendemos lo que quieren decir los usuarios cuando nos presentan así su disco averiado: el disco no sufrió ninguna caída o subida de tensión, no se formateó, etc. Pero cuando un disco no funciona, ¡es porque algo le pasa…!
Aunque no sean tan llamativos como un disco que hace ruido de clic o de golpeteo, o que huele a quemado, esos otros fallos en los que al disco “no le pasa nada” también van a requerir herramientas especializadas y muchas horas de trabajo por parte de los expertos del laboratorio de recuperación de datos, a veces incluso más que con otros tipos de fallos.

«Pero si es un pen drive muy pequeño, tiene que ser más fácil de recuperar. Y más barato.»

Los pen drives o memorias USB funcionan con memoria flash, que es una tecnología más moderna que los platos magnéticos de los discos duros y que requiere unas herramientas y unos procesos diferentes. En muchos casos, es un proceso más complicado que el de los discos duros. La facilidad o la dificultad va a depender de la tecnología que haya que utilizar para la recuperación, más que del tamaño.

Más artículos en esta serie:

  1. Falsas creencias sobre la recuperación de datos [Parte I]
  2. Falsas creencias sobre la recuperación de datos [Parte II]
  3. Falsas creencias sobre la recuperación de datos [Parte III]

¿Tienes una buena copia de seguridad?

Recuerde hacer un buen backup

En el servicio de recuperación de datos de Ondata atendemos con frecuencia a clientes que han tenido una avería en su disco duro y no disponen de una copia de seguridad válida.

La mayoría de los usuarios de informática sabemos que es importante hacer copias de seguridad, pero la verdad es que muchos lo dejamos de lado hasta que es demasiado tarde.

Si no tienes copia de tus datos, hoy puede ser el mejor día para ponerte manos a la obra. ¡No lo dejes para mañana!

Pero… incluso si estás tranquilo porque tienes backup, puedes llevarte más de un disgusto.

¿Por qué? Porque tan importante como hacer copias de seguridad es configurarlas bien y tenerlas al día. Es necesario comprobar el funcionamiento del backup de forma regular. Así, el día que necesitemos recuperar los datos, nos evitaremos este tipo de sorpresas:

1. La copia no está al día.

Se trata de copias que hay que actualizar manualmente… y los usuarios no lo hacen.  “Me encargo de la informática de la empresa, no dejo de insistir a los usuarios para que se encarguen de sus copias, pero no lo consigo”.

MEJOR: hacer copias automáticas.

2. La copia dejó de funcionar.

“Se nos ha estropeado el disco duro con los datos de la empresa y, al ir a buscar la copia, resulta que el disco había fallado hacía meses y nadie se había dado cuenta”.

MEJOR: comprobar el buen funcionamiento de la copia, de forma regular y frecuente.

3. El soporte donde se realiza la copia se ha llenado.

“Cuando fui a buscar la copia, el disco se había llenado hacía tiempo y había parado de copiar”.

MEJOR: si se tiene poco espacio y muchos datos, hacer copias incrementales en vez de diferenciales.

4. La copia estaba en el mismo disco duro.

“Como el disco tenía mucho espacio, configuramos el backup en el mismo, y ahora se ha estropeado el disco y nos hemos quedado sin las dos copias”.

MEJOR: hacer la copia en otro soporte.

Aunque existan empresas de recuperación de datos capaces de recuperar la mayoría de fallos que puedan tener los discos duros, recuerda que es mejor estar preparado y tómate un momento para poner al día tus copias de seguridad.

Y si a pesar de todos tus desvelos te persigue la fatalidad («Se me estropeó el ordenador y al día siguiente el disco duro con la copia de seguridad» ), puedes contar con Ondata: los datos suelen ser recuperables en un 90% de los casos.